En este momento estás viendo El juego es la mejor forma de enseñar, estimular y hacer feliz a los niños

El juego es la mejor forma de enseñar, estimular y hacer feliz a los niños

  • Autor de la entrada:
  • Categoría de la entrada:Sin categoría
  • Comentarios de la entrada:Sin comentarios

Los padres deben realizar actividades lúdicas con sus hijos. Al hacerlo, les transmiten conocimientos, amor y les ayudan a manejar frustraciones.Esta actividad es inherente al desarrollo y, por eso, nunca debe prohibirse, sino estimularse. Los padres que juegan con sus hijos no solo comparten momentos de placer: estrechan lazos afectivos, se relacionan mejor y logran conocerlos.


Los padres son proveedores de situaciones y objetos que van a estimular en el niño todos los conocimientos básicos de percepción, afirma la psicóloga clínica María Mercedes Esguerra. El infante adquiere madurez emocional con la ayuda de sus padres ?agrega- pues ellos le enseñan a manejar frustraciones a través del juego, como saber ganar o perder.


Jugar, además, es una manera de brindar cariño desde los primeros meses de vida, pues resulta una comunicación afectuosa y permanente.


El juego se inicia desde el momento del nacimiento e involucra gestos, caricias, palabras y movimientos. Con el paso del tiempo, aparecen otro tipo de habilidades físicas y cognitivas en el infante que dan la pauta para la puesta en marcha de diferentes actividades lúdicas?, afirma la sicóloga infantil Cecilia Zuleta.


Siempre que haya un vínculo emocional en el juego familiar, esos aprendizajes se van a fijar mucho más fácilmente, agrega la sicóloga Juana Morales. La familia debe utilizar los espacios para la lúdica y recreación y recurrir a las fortalezas y habilidades de cada uno de sus miembros. Interactuar con los hijos en estos espacios nutre su identidad y autoestima.


A qué se puede jugar
En la selección de los juegos se deben tener en cuenta los gustos, necesidades y habilidades de los hijos según su etapa de desarrollo. Algunos se interesan por los movimientos, otros por la lectura, otros por el arte y otros por los juegos de mesa. Es importante que sea libre y espontáneo.


Las guías de crianza del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), la Sociedad Colombiana de Pediatría y la Corporación Día del Niño aconsejan:
– Saltar cuerda: mejora la comunicación entre los dos hemisferios cerebrales.
– Bailar: favorece el equilibrio y el ritmo.
– Manipular barro y plastilina: desarrolla la creatividad y mejora la motricidad fina.
– Juegos tradicionales: la lleva, las escondidas y la golosa estimulan el desarrollo social, motor y cognitivo a partir de la secuencia y la organización. El pequeño aprende a respetar turnos.
– Leer e inventar cuentos infantiles: los niños construyen mundos y encuentran soluciones a los conflictos.
– Rondas infantiles: aprenden a vencer los miedos.
– Juegos de mesa: integran a la familia en torno a un objetivo común, favorecen el lenguaje, el sentido de direccionalidad y la aptitud matemática.
– Muñecos y demás juguetes: desarrollan la independencia.
– Juegos de roles: representa su cotidianidad y aprende a identificar comportamientos.
– Juegos de parque: con una pelota el cuerpo está en movimiento; un lazo fortalece su motricidad gruesa.


Otros aprendizajes
– Jugar en familia le transmite a los niños conocimientos en cuanto a forma, color, tamaño, posición, tiempo, cantidad, lenguaje y esquema corporal.
– Cuando juega, un pequeño explora su entorno, socializa, compite, inventa, decide, piensa, encuentra soluciones y aprende a esperar turnos.
– El juego entre padres e hijos favorece el desempeño social y desarrollo sensorial, motor y cognitivo de los pequeños.
– Aprenden valores como la justicia, la honradez, ganar y perder.
– Logran establecer pautas, reglas y a estrechar lazos de solidaridad y amistad.


Los juguetes ideales según la edad del niño
De los 0 a los 9 meses:
 los juguetes más indicados son aquellos que llaman la atención de los sentidos, con énfasis en la parte visual. Los bebés prefieren los que son suaves y tienen texturas, se puedan manipular o emitan algún sonido.
Entre los 9 y los 18 meses: los mejores son los que muestran una causa y un efecto y les ayudan a resolver problemas, como aquellos en los que tienen que insertar figuras geométricas o tocan la imagen de un animal y suena.
Desde los 18 hasta los 36 meses: se vuelve importante el juego simbólico. En esta etapa son fundamentales los que representan la realidad, como muñecas o carros. Los materiales como crayones, pinturas o plastilina sirven para incentivar la creatividad.
Desde los 3 años, los niños desarrollan la imaginación en sus juegos.
4 a 5 años: fichas para hacer construcciones; dramatizaciones, pintura, disfraces (cada día se reúne la familia y sus miembros demuestran sus aptitudes en dramatizaciones).
6 a 7: pelotas de fútbol, bicicleta, juegos de mesa como el dominó, el parqués y el ajedrez. Es importante enseñarles a perder.
Los patines, la bicicleta y el triciclo son actividades pre deportivas que fortalecen la coordinación de ambos lados del cuerpo.
Patinar ayuda al equilibrio; montar en triciclo (3 años) y bicicleta (a partir de los 5 o 6 años) mantiene los sentidos alerta y coordina el movimiento de los pies. Salir a ciclovía con los niños es una linda actividad familiar.

Por Andrea Linares
Redactora ABC del bebé

Deja una respuesta